La marca de tequila Viuda de Romero, fundada en 1852, se consolidó como una de las favoritas del público, reconocida por la imagen de Catalina, la viuda, en su etiqueta. Sin embargo, con el tiempo, la figura de doña Catalina dejó de resonar con la «viuda moderna» que atrae a las nuevas generaciones.
El principal desafío para la agencia de mercadotecnia fue reinventar la marca sin perder su esencia tradicional. Hoy en día, Viuda de Romero ofrece una bebida refrescante elaborada con jugos naturales y combinada con tequila, adaptándose así a los gustos contemporáneos.