Cada sorbo es un instante suspendido. Cada ingrediente, un ritmo fluido. El cuerpo dejando atrás la pesadez de lo complicado y, en cada sorbo, tropiezos de sabor que recuerdan la magia de lo natural, la facilidad de lo limpio, la pureza del silencio que habla. Juicy Folks nos entrega esta pausa. Detox de todos los colores y energías que rompen lo usual, que comprenden la simplicidad de lo bueno, o shots que se convierten en pequeños recordatorios de la fuerza guardada dentro del cuerpo cansado.
En el apresurado ritmo, Juicy Folks da quietud; sin preguntar, se convierte en el elemento del día donde cada ingrediente juega a tu favor, rompiendo esquemas y sobresaltos, poco a poco, sin prisa, sin artificios.