Alzándose en espuma, en el oro líquido danzante, consigues retratar el instante preciso en que la sed y el deseo se confunden. Bebida sin pretextos, entre la calma y el caos, Cerveza Huerca es un golpe de vida entre los labios, desafiando artesanalmente lo ordinario.
Atrapada en un sueño, en el verano de 2017, la idea tomó cuerpo: crear una cerveza que hablara con la misma valentía de su tierra. Como el fuego que enciende la noche y el vértigo de un primer sorbo, Cerveza Huerca nace con la fuerza de quien no teme arder, mujer joven, esencia indomable, norte tatuado en el pecho. La noche se convierte en historia en el roce de un brindis, un sorbo donde el tiempo se diluye en una botella.