Picking por pedido y picking por oleadas: ¿Cuál te conviene?

El picking es uno de los procesos más críticos en cualquier operación logística. Su eficiencia influye directamente en la velocidad de entrega, la satisfacción del cliente y el uso de recursos dentro del almacén. Existen distintos métodos para llevarlo a cabo, pero los dos más comunes son el picking por pedido y el picking por oleadas. Elegir entre uno u otro puede representar una mejora significativa en tu operación… o un dolor de cabeza si no eliges el adecuado.

Ambos métodos son válidos y funcionales, pero su efectividad depende del tipo de operación que tengas, del volumen de pedidos, de la variedad de productos y de los tiempos comprometidos con tus clientes. Por eso, antes de elegir o cambiar tu estrategia de surtido, conviene entender cómo funciona cada uno y qué implicaciones tiene en la práctica.

¿Qué es el picking por pedido?

El picking por pedido, también conocido como discreto o individual, consiste en surtir un pedido a la vez. Un operador toma una orden, va por los productos requeridos, los lleva a zona de empaque y luego pasa al siguiente pedido. Es un proceso lineal y sencillo, ideal cuando se manejan pocos pedidos simultáneos o cuando cada pedido tiene productos muy distintos.

Este tipo de picking tiene la ventaja de ser fácil de controlar y entender. Además, minimiza los errores de mezcla entre pedidos, ya que cada orden se maneja de forma independiente. Sin embargo, puede ser ineficiente si tienes muchos pedidos con productos repetidos, ya que el operador recorre varias veces los mismos pasillos para surtir productos similares.

Es un método útil en operaciones de bajo volumen o donde se requiere alto nivel de personalización por pedido. También funciona bien cuando el layout del almacén es compacto y el desplazamiento no representa un gran gasto de tiempo.

¿Qué es el picking por oleadas?

El picking por oleadas, también llamado batch picking o picking agrupado, consiste en juntar varios pedidos y surtirlos en un solo recorrido. El operador recoge todos los productos requeridos en múltiples pedidos, y luego estos se separan en una etapa posterior llamada consolidación o sorteo.

Este método es altamente eficiente cuando hay muchos pedidos pequeños con productos en común. Reduce significativamente los tiempos de desplazamiento, ya que el operador sólo pasa una vez por cada ubicación para tomar todas las unidades necesarias. Por ejemplo, si tres pedidos contienen el mismo artículo, lo recoge una sola vez para luego asignarlo a cada pedido en la zona de empaque.

La complejidad del picking por oleadas es que requiere un buen sistema de control y personal capacitado en la fase de separación. Si no se hace correctamente, pueden generarse errores de asignación y retrasos en la salida.

Este método es ideal en operaciones de alto volumen, con muchos pedidos al día y alta repetición de productos. También favorece a los almacenes amplios, donde los recorridos largos penalizan la eficiencia si se trabaja con surtido individual.

¿Cómo elegir el mejor para tu operación?

La elección entre uno u otro método depende principalmente de cuatro factores: volumen de pedidos, repetición de productos, layout del almacén y tecnología disponible. Si procesas más de 50 pedidos al día y la mayoría comparten artículos similares, el picking por oleadas puede reducir tus tiempos hasta en un 30%. Si en cambio tienes pedidos muy variados, con productos únicos o personalizados, el picking por pedido ofrece mayor precisión.

Otro punto a considerar es la capacidad de tu sistema WMS o tu proceso manual para manejar la consolidación. Si no tienes un sistema que agrupe automáticamente los pedidos ni personal experimentado en separar mercancía, podrías estar introduciendo errores que anulan cualquier ganancia de velocidad.

También puedes optar por un modelo híbrido: usar picking por pedido en ciertos horarios o zonas del almacén, y oleadas en picos de alta demanda o con productos específicos. Lo importante es que elijas con base en datos y no por inercia operativa.

Mide y ajusta: la clave del picking eficiente

Cualquiera que sea el método que elijas, es fundamental medir continuamente su rendimiento. ¿Cuánto tiempo tarda en promedio un picker por pedido? ¿Cuál es el porcentaje de errores en surtido? ¿Qué tan saturada está la zona de consolidación? Estas respuestas te dirán si el método elegido está funcionando o si debes hacer ajustes.

También considera los tiempos de corte y la promesa al cliente. En operaciones con entregas el mismo día o con ventanas muy estrechas, el picking por pedido puede ofrecer más control. En cambio, si tu promesa es menos urgente y manejas muchos pedidos similares, el picking por oleadas puede ser tu mejor aliado.

En logística, no hay soluciones universales. Pero entender las diferencias entre estos métodos y saber cuándo aplicar cada uno te permitirá optimizar tiempo, reducir errores y, sobre todo, mantener la operación alineada con los objetivos del negocio.

Compartir