Brasil ha logrado posicionarse como líder en logística en América Latina, tras ascender cinco posiciones en el Índice de Rendimiento Logístico (LPI) del Banco Mundial. En la última edición de este informe, el país alcanzó el puesto 51, superando a otras economías de la región, incluido Panamá, que cayó 19 posiciones desde la edición anterior en 2018. Este avance es resultado de mejoras significativas en infraestructura, modernización de procesos logísticos y estrategias enfocadas en la eficiencia del comercio exterior.

Ascenso en el índice de rendimiento logístico
El Índice de Rendimiento Logístico (LPI) es un informe publicado por el Banco Mundial que evalúa el desempeño de los sistemas logísticos de más de 160 países. Entre los criterios evaluados se encuentran la eficiencia en el despacho aduanero, la calidad de infraestructura, la facilidad de acceso a envíos internacionales, la competencia del sector logístico, la capacidad de seguimiento y rastreo de envíos, así como la puntualidad en las entregas.
Brasil ha mejorado en varios de estos indicadores, lo que ha permitido su ascenso en la clasificación global. Las inversiones en infraestructura portuaria, modernización del transporte terrestre y digitalización de procesos han sido claves en este desempeño.
Inversiones en infraestructura y transporte
El gobierno brasileño ha destinado importantes recursos para fortalecer la red logística del país. Se han realizado inversiones en la ampliación y modernización de carreteras, ferrocarriles, puertos y aeropuertos, con el objetivo de reducir costos operativos y mejorar la conectividad interna y con mercados internacionales. Algunas de las principales iniciativas incluyen:
- Ampliación de la red ferroviaria: Se han impulsado proyectos como el Ferrocarril Norte-Sur y el Ferrocarril de Integración del Centro-Oeste, que buscan mejorar el transporte de mercancías hacia los principales puertos de exportación.
- Modernización portuaria: Se han implementado mejoras en los puertos de Santos y Paranaguá, los más importantes del país, para agilizar la carga y descarga de mercancías.
- Expansión del transporte aéreo de carga: Se han optimizado los aeropuertos de São Paulo y Río de Janeiro para mejorar la capacidad de exportación de productos de alto valor.
Digitalización y eficiencia logística
La adopción de nuevas tecnologías ha sido un factor clave en la evolución del sector logístico en Brasil. La digitalización de procesos aduaneros ha permitido una mayor eficiencia en la liberación de cargas, reduciendo tiempos de espera y costos para las empresas. Entre las principales innovaciones implementadas destacan:
- Sistemas de seguimiento en tiempo real: Permiten un monitoreo preciso de las cargas y optimizan la gestión de inventarios.
- Plataformas digitales para la gestión aduanera: Agilizan los trámites de importación y exportación, reduciendo burocracia y aumentando la competitividad de las empresas brasileñas en el comercio global.

Brasil vs. Panamá: Cambio en el liderazgo logístico regional
Históricamente, Panamá ha sido considerado el líder en logística en América Latina, gracias a la presencia del Canal de Panamá, un punto clave para el comercio mundial. Sin embargo, en la última edición del LPI, Panamá cayó 19 posiciones, quedando por detrás de Brasil. Las razones de esta caída incluyen desafíos en la eficiencia aduanera y problemas de infraestructura en algunos puertos del país centroamericano.
El avance de Brasil en el ranking demuestra que las estrategias de inversión y modernización pueden generar un impacto significativo en la competitividad logística de un país. Aunque aún enfrenta desafíos, como la necesidad de reducir la burocracia y mejorar la seguridad en el transporte de mercancías, Brasil ha logrado consolidarse como una potencia logística en la región.
Brasil ha demostrado un progreso notable en su sector logístico, gracias a inversiones estratégicas en infraestructura, digitalización y modernización del transporte. Su ascenso en el Índice de Rendimiento Logístico del Banco Mundial refleja el impacto positivo de estas iniciativas y posiciona al país como líder en América Latina. Con una visión de mejora continua, Brasil busca seguir fortaleciendo su competitividad y consolidarse como un actor clave en la logística global.