El patín hidráulico es una de las herramientas más utilizadas en los almacenes. Su aparente sencillez hace que muchas veces se subestime la importancia de usarlo correctamente. Sin embargo, un mal manejo no solo provoca daños en la mercancía, también puede afectar la seguridad del personal y generar costos adicionales por reparaciones o reposiciones. Detectar los errores más comunes es el primer paso para corregirlos.

Sobrecargar el equipo
Uno de los errores más frecuentes es exceder la capacidad de carga del patín hidráulico. Aunque algunos modelos soportan más de dos toneladas, no significa que deban usarse siempre al máximo de su capacidad.
El sobrepeso acelera el desgaste de las ruedas, dificulta la maniobra y aumenta la probabilidad de accidentes, especialmente en superficies irregulares o con rampas.
Mala colocación de las uñas
Otro problema común es introducir las uñas del patín de manera incorrecta bajo la tarima. Si no se centra adecuadamente, el peso queda mal distribuido y puede provocar que el pallet se incline o incluso caiga durante el traslado.
Esto no solo daña el producto, también incrementa el riesgo de lesiones para el operador. La colocación correcta requiere precisión y atención antes de levantar la carga.
Uso en superficies inadecuadas
Los patines hidráulicos están diseñados para suelos planos y resistentes. Usarlos en superficies irregulares, con desniveles o con huecos puede provocar atascos, golpes o vuelcos de la carga.
A pesar de esta limitación, en muchos almacenes se utilizan en zonas no aptas, lo que acorta la vida útil del equipo y genera incidentes innecesarios.
Velocidad excesiva en la maniobra
En la presión por cumplir tiempos, algunos operadores empujan o jalan los patines a una velocidad inadecuada. Esta práctica puede parecer inofensiva, pero reduce el control sobre el equipo y aumenta el riesgo de choques con racks, paredes o personas.
La velocidad debe ajustarse siempre al espacio disponible y a la visibilidad del pasillo, priorizando la seguridad sobre la rapidez.
Falta de inspección previa
Un error recurrente es no revisar el estado del patín antes de usarlo. Ruedas desgastadas, fugas de aceite o problemas en el sistema hidráulico pueden pasar desapercibidos y provocar fallas durante la operación.
Implementar una revisión rápida antes de cada turno permite detectar anomalías a tiempo y evitar contratiempos mayores en plena maniobra.
Desconocimiento del personal
Muchas veces los errores no provienen de descuidos, sino de la falta de capacitación adecuada. Operadores nuevos que nunca recibieron una inducción formal tienden a improvisar y aprender sobre la marcha, lo que aumenta las probabilidades de cometer fallas.
Un programa de capacitación breve pero constante puede marcar la diferencia en la seguridad y eficiencia del uso de patines hidráulicos.
Consecuencias económicas y operativas
Cada error en el uso de patines se traduce en costos ocultos: reparaciones de producto dañado, reposición de pallets, mantenimiento del equipo o incluso indemnizaciones en caso de accidentes laborales.
Además, un incidente puede retrasar la operación completa, afectando el cumplimiento de pedidos y la satisfacción de los clientes.

Cultura de prevención
La solución no está solo en corregir errores, sino en fomentar una cultura de prevención. Supervisar el uso de los patines, capacitar al personal y mantener un programa de revisiones periódicas asegura que esta herramienta cumpla su función sin convertirse en un riesgo.
El patín hidráulico seguirá siendo indispensable en cualquier almacén, pero su correcto uso es lo que realmente garantiza seguridad y eficiencia en la operación.